miércoles, 29 de febrero de 2012

"SE REMONTARAN CON ALAS COMO ÁGUILAS"



Con el Repaso de la Escuela del Ministerio Teocrático de ayer me puse a meditar en el poder que Jehová nos da.
En la pregunta 4 bajo el texto de Isaias 40.31 aprendemos mucho del águila cuando nos hallamos cansados. La información de la Atalaya del 15 de Junio de 1996 pagina 10 párrafos 1-4, dice lo siguiente:
"El águila vuela alto casi sin esfuerzo, pues aprovecha corrientes de aire caliente por las cuales sube, y cuando está bien alto, abre las alas y la cola,  y solo vuela en círculos dentro de la columna de aire caliente con un consumo mínimo de energía. Esto ilustra cómo la fuerza de Jehová puede elevarnos tanto espiritual como emocionalmente para que sigamos adelante. Tal como el águila no puede elevarse a tales alturas por su propia fuerza, nosotros tampoco lo logramos confiando en nuestras propias aptitudes, sino con el espíritu santo."
Pregunto: ¿Qué hace el águila para mantenerse volando en el aire caliente? Abre las alas y la cola. ¿Qué hacemos nosotros para elevarnos cuando estamos en problemas y no podemos más? El articulo decía: "Pedir espíritu santo mediante oraciones fervorosas".  Ruegos, súplicas. Jehová no sólo ve nuestro sufrimiento, sino que se conduele y se siente impulsado a ayudarnos (Éxodo 3.7).


"Clamaron, y Jehová mismo oyó,

y de todas sus angustias los libró.

 Jehová está cerca de los que están quebrantados de corazón;

y salva a los que están aplastados en espíritu."

 (Salmo 34:17,18).


"Por lo tanto, si ustedes, aunque son inicuos, saben dar buenos regalos a sus hijos, ¡con cuánta más razón dará el Padre en el cielo espíritu santo a los que le piden!” 
(Lucas 11:13).


"Para todas las cosas tengo la fuerza en virtud de Aquel que me imparte poder" 
(Filipenses 4:13).

 "Debido a la tierna compasión de nuestro Dios. Con esta [compasión] nos visitará un amanecer desde lo alto, para dar luz a los que están sentados en oscuridad y en sombra de muerte, para dirigir nuestros pies prósperamente en el camino de la paz”. (Lucas 1.78, 79)

martes, 28 de febrero de 2012

RENACER Y RESILIENCIA


Alguien dijo: "La resiliencia es la capacidad de una persona o grupo para seguir proyectándose en el futuro a pesar de acontecimientos desestabilizadores, de condiciones de vida difíciles y de traumas a veces graves. Existen muchísimas personas que, aún habiendo vivido una situación traumática, han conseguido encajarla y seguir desenvolviéndose y viviendo, incluso, en un nivel superior, como si el trauma vivido y asumido hubiera desarrollado en ellos recursos latentes e insospechados".


Esto nos muestra que, aunque somos imperfectos, Jehová es quien nos da las fuerzas para ser resilientes, para aprender del pasado y proyectarse a futuro, en un tiempo en que "Dios limpiará toda lágrima de los ojos" (Rev. 7.17b).


Los pequeños tropiezos nos sirven para aprender, todos necesitamos aprender de las cosas que nos pasan... y si en algún momento estoy triste, habrá un espacio para el dolor. PERO aprendí a estar resuelta a  limpiarme las heridas y a  no permitir que eso me robe el gozo. Tenemos que luchar. Llorar y secar las lagrimas para que las lagrimas no nos impidan ver el cielo azul.
No todo está perdido, gracias a Jehová, como cristianos aun tenemos los sueños intactos.


"Dios es fiel, y no dejará que sean tentados más allá de lo que puedan soportar, sino que junto con la tentacion tambien dispondrá la salida para que puedan aguantarla" 
(1 Corintios 10:13b).

miércoles, 22 de febrero de 2012

SI TU OJO ES SENCILLO...




Hace cuatro días en la consulta atendimos a una paciente y nos contó que  se había operado de la vista. Su problema era el Estrabismo, enfermedad que afecta a ciertos músculos oculares dificultando mirar hacia un punto fijo. Tener uno o los dos ojos desviados caracteriza a esta enfermedad.  

Antes de atenderla, el dentista le preguntó cómo era su vida antes de operarse, pues como su vista miraba a dos partes diferentes a la vez, obviamente veía una imagen doble.  Ella respondió que sí era muy complicado, veía dos imágenes: una que era la correcta y la otra estaba superpuesta un poco más arriba y a la vez torcida.  Le preguntamos cómo podía vivir así, a lo que ella respondió:
-“Me acostumbré a ignorar la otra imagen. Me concentraba en la imagen correcta y simplemente hacía como que la otra imagen no existía. Uno se acostumbra a todo”. 

Acerca de esto, siempre me ha llamado la atención el texto de Mateo 6: 22, 23. La nota al pie de pagina en el versículo 22 muestra que “ojo sencillo” significa 4 cosas: “Es sincero; está todo en una sola dirección; está enfocado; es generoso”. 
  
Ahora pienso, en lo tormentoso que es tener un defecto en la vista y lo que la gente está dispuesta a hacer para corregirlo, ¡cuánto más deberíamos estar dispuestos a corregir nuestra visión espiritual!
También me parece digno de notar que Jesús dijo que lo contrario de ojo sencillo NO es “ojo complicado”, sino “OJO INICUO”.  Acerca de esto me gustaría recordar la experiencia de un señor llamado Hitoshi quien fue a su primera reunión con los Testigos de Jehová, citada en la Atalaya del 1 de Abril de 1999, pagina 6:
Hitoshi asistió a un discurso, y le sorprendió escuchar el consejo de ‘mantener el ojo sencillo’. El orador explicó que el ojo “sencillo” es el que tiene visión de futuro y está enfocado en los asuntos espirituales; en cambio, el ojo “inicuo”, o “envidioso”, es el que se centra solo en los deseos carnales inmediatos y es corto de vista. Le impactó profundamente el siguiente consejo: “Donde está tu tesoro, allí también estará tu corazón”. Hay algo más importante que conseguir riquezas. Nunca había oído nada parecido”.
Como conclusión:
Si uno está dispuesto a someterse a una cirugía con anestesia general para poder corregir un defecto de la visión física… ¿qué sacrificio estamos dispuestos a hacer para corregir nuestra visión espiritual?
Una enfermedad a la vista puede significar molestias continuas y terminar en accidentes, pero el tener un ojo “inicuo” lleva a la muerte eterna. ¿Qué escogeremos? ¿Nos dejaremos corregir? ¿o nos acostumbraremos a vivir asi como mi paciente que decía que uno se acostumbra a todo?  Que no sea así, cambiemos cuando aún es tiempo.

sábado, 18 de febrero de 2012

¿EN QUIÉN CONFIAREMOS?



Y estuve enferma. Para mejorar tomaba todos los medicamentos indicados y por alguna razón me encontraba peor. Hasta que el doctor me envió a otro centro mas especializado y allí los médicos acordaron seguir experimentando con mas medicamentos, los cuales segun ellos, iban a obrar milagros.
El real milagro ocurrió cuando mi medico tratante tuvo un momento de iluminacion y dijo: ¿"Y si te quitamos todos los medicamentos"?. Ése fue el momento de cambio, pues empecé a sentirme mucho mejor.
Sé que mi caso fue especial, pues se que hay personas que sí necesitan los medicamentos para aliviarse, pero mi caso era diferente porque...
todos los medicos fallaron en el diagnostico.
Sin el diagnostico correcto, lo que se hace es "dar palos de ciego". Se intenta, se trata de mejorar al paciente, pero no se consiguen resultados.


Esto me hace pensar en lo siguiente:


Jehova es el Gran Medico que no se equivoca con sus diagnosticos. Cuando El nos aconseja y nos aplica tratamiento, ¿obedecemos? 
Si somos obedientes al tomar la medicina que nos dan los medicos humanos, quienes pueden haber errado el diagnostico, ¿obedecemos a Jehová, quien no se equivoca?
Un medico humano puede hacerse cargo de nuestro caso clinico sin tener la menor idea de qué enfermedad tenemos, y aun asi confiamos en él... sin embargo...


¿Confiamos en Jehová, quien lo sabe todo?


"No cifren su confianza en nobles, ni en el hijo del hombre terrestre, a quien no pertenece salvacion alguna. Feliz es el que tiene al Dios de Jacob por ayuda suya, cuya esperanza está en Jehová su Dios"
(Salmo 143:3, 5)


"Confia en Jehová con todo tu corazon y no te apoyes en tu propio entendimiento. En todos tus caminos tomalo en cuenta y el mismo hará derechas tus sendas"
(Proverbios 3:5, 6).

viernes, 17 de febrero de 2012

NO ES LO QUE PARECE





Cerca de mi casa había un sitio eriazo el cual  no tenia esperanza de ser ocupado con algo útil, hasta que un día vi que llegaban camiones con arena y ripio. Exclamé: ¡Por fin van a construir algo aquí! 
El problema fue que no empezó ninguna construcción... llegaban camiones con arena y luego se llevaban arena, llegaban con ripio y se llevaban ripio. ¿Qué sucedía?
No era una construcción, sino un deposito de áridos, materiales de construcción.
Ahí me di cuenta de que las cosas no son lo que parecen. ¿Cuantas veces hemos juzgado algo según su apariencia? ¿Cuantas veces creímos algo que no es por no saber el trasfondo?


Bien dice la Biblia:
"No mires su apariencia ni lo alto de su estatura, porque lo he rechazado. Porque no de la manera como el hombre ve es como Dios ve, porque el simple hombre ve lo que aparece a los ojos, pero en cuanto a Jehová, el ve lo que es el corazón"
(1 Samuel 16:7).


"Y sobre el tiene que asentarse el espíritu de Jehová, el espíritu de sabiduría y de entendimiento [...]. Y el no juzgará por la mera apariencia de las cosas a sus ojos, ni censurará simplemente según lo que oigan sus oídos"
(Isaias 11:3).


Para meditar...

sábado, 11 de febrero de 2012

SÉLAH (Poema)




Siento suavemente en mi rostro el rocío.
Veo los prados verdes, siento el perfume de las rosas.
Agradezco a Jehová todas las cosas 
que Él ha creado para el deleite mio.

Escucho para mi Dios dulces alabanzas,
veo la sonrisa de un niño, la alegría del sol
que brilla en el cielo con su gran esplendor
donde no hay nubes que nublen mi esperanza.

Díganme, ¿cómo le doy a mi Dios las gracias
por dejar su santa verdad en mi corazón,
por ser su colaborador en la predicación,
por amarme tanto y escuchar mi humilde oración?

Jehová, ¿quien soy yo para que te fijes en mi,
para que me consideres digna de seguirte sirviendo?
Pues por mucho tiempo he estado sufriendo
los males de este mundo destinado a morir.

En tu gran misericordia ocúltame por favor, 
eres mi escudo, mi fuerza, mi vida.
Por eso, hágase en mi lo que tu espíritu diga,
tu bondad inmerecida ha cubierto mi error.

Las flores me observan y me hablan de su Creador,
los arboles danzan en su alegre alborozo.
Los veo felices y me producen gozo,
el viento me abraza y a mi rostro lo acaricia el sol.

Puedo hablarle al mundo de Jehová 
y de todas sus maravillas.
Cuando voy caminando llevando la semilla
siento cómo mi Dios sus fuerzas me da.

Nunca podré tu santa verdad olvidar,
dame fuerzas para aguantar este inicuo sistema.
El tiempo pasa y siento cada vez mas cerca
el día en que tu soberanía se vindicará.


5 Octubre 2003
Eunice